Deriva en Bicicleta
La deriva en bicicleta, hecha a partir de una visita al los toldos de san Pelayo en Usaquén, demuestra una vez más la versatilidad de este medio de transporte, donde pude acceder a un sitio donde normalmente los vehículos no pueden entrar. Demuestra también la economía en cuanto a tiempo y a dinero, además de ser un transporte saludable y bueno para el medio ambiente. En el viaje a bicicleta no hay limites que determinen por donde ir, el conductor es libre de tomar cualquier ruta, no existen paredes que lo detengan ni que lo aíslen de la realidad, hay un contacto más de frente con lo que nos rodea, sin que de alguna manera este interviniendo o detallando lo que hay a su alrededor.
La gente piensa que el andar en bicicleta es inseguro, que es demorado y que de alguna manera hay un desgaste físico enorme, la mayoría de las personas no utiliza este medio de transporte por que se sienten desprotegidos y vulnerables a lo que nos rodea.
Bitácora de viaje
Ya que la salida fue el domingo se facilito la movilización en bicicleta gracias a la ciclo ruta dominical, mucha gente se mueve en sus bicicletas bien sea por deporte o por llegar a algún lado en especifico. Se pueden ver muchas familias compartiendo en este espacio y muchos jóvenes que salen con su “parche” de amigos a pasar el rato. Llegando a la séptima se puede ver la molestia de los conductores por esta costumbre dominical en la capital.
Gracias a la versatilidad de mi medio de transporte pude cruzar por los parques aledaños a hacienda santa bárbara, donde se puede apreciar el arte de la calle, bien sea por los tantos graffiti que hay en las paredes o por las artesanías de los diferentes artesanos de la calle. También logré andar entre las personas escuchando, no detalladamente algo de lo que contaban entre ellos. Pude movilizarme libremente por donde los carros no tienen acceso y poder conocer todo lo que la feria ofrece.
De regreso a la casa la ciclo ruta ya había finalizado, y ya los carros ocupaban el lugar donde las bicicletas circulaban. De esta forma tuve que andar con mas cautela por las calles, ya que la cultura colombiana, en especial la de los taxistas y buseteros no respetan ni al peatón, ni al ciclista, con esto no quiero decir que sea peligroso andar en bicicleta, simplemente hay que ser un poco mas cauteloso. En el camino me encontré con una ciudad bastante sola y poco circulada por los carros, sinembargo si se puede ver gente caminando por las calles. Pude meterme entre los barrios para acortar camino y explorar un poco más allá de lo que normalmente un carro vería, hubo de alguna forma una conexión con la naturaleza, con el roce con el viento, fui libre por un instante de ir y hacer lo que quería, de entrar por partes por donde ni a pie llegaría, divise la vida cotidiana de un domingo desde otro punto de vista.
noviembre 27, 2009 8:19 a. m.
Desde el principio nos encantó su idea, manejaron muy bien la deriva, investigaron diferentes puntos de vista y lo unieron en este fantástico producto, pero por favor, encerio queremos que les vaya bien en la entrega, revisen sus equipos antes de montarlos, los videos, que no se les apague nada cuando henry o roxana pasen, siempre han tenido buenas ideas y esperamos que en ésta no les falte nada. suerte¡